De
fotógrafo, llamadas telefónicas y el corazón roto
Primero, el instructor de baile, ahora el fotógrafo –Jaejoong
había empezado a pensar que no le agradaba a la gente de la empresa.
—Dios, ¿lo entiendes? Tu expresión está apagada. Necesitamos
que luzcas ‘en blanco’, y no te ves así en absoluto.
—Bien, ahora se seductor.
Jaejoong se preguntaba en su mente, ¿qué clase de
seducción el fotógrafo deseaba? Se fue con su instinto y entreabrió los labios
ligeramente y levantó la mandíbula. Él recordaba hacer la misma postura antes,
durante una sesión de fotos y la nuna que estaba tomando su foto dijo que era
sexy.
—No hay ninguna expresión en tus ojos y eso no es sexy
—El fotógrafo casi gritó. Jaejoong pensó que debía de estar cansado
considerando que era el último en hacer la sesión de fotos y ya era medianoche.
—Tienes que ser específico, ¿qué tipo de sexy quieres?
—dijo Jaejoong con ganas de terminar la sesión antes y detener al malhumorado fotógrafo
de pedirle lo imposible. De jovial, a cara irritada, entonces de pose varonil a
expresión en blanco y repentinamente seductor – Jaejoong no podía hacer frente
a los cambios locos cada dos tomas.
—Quiero sexy, sexy.
Jaejoong frunció las cejas por eso. Ciertamente se
había encontrado con fotógrafos extraños con peticiones ridículas, y este
hombre seguro que era la última adición a la lista de Jaejoong.
—¿Sexy, sexy? Está bien —Asintió Jaejoong, separando
los labios un poco y levantando la mandíbula.
—¡Me estás dando la misma pose!
¿Lo hizo? Jaejoong ni siquiera podía recordar el tipo
de pose que había hecho antes, puesto que él había hecho muchas en tan sólo
unos minutos.
—Lo que sea, se juguetón ahora.
—¿Podemos ir despacio? —murmuró Jaejoong, a pesar de
que estaba listo para saltar arriba y abajo mientras hacía expresiones cómicas.
—Debiste haber perdido tu capacidad cuando te caíste por
las escaleras, o la gente solo estaba inventando acerca de que eres un
profesional... ni siquiera puedes dar la mitad de lo que quería.
—Está bien —Jaejoong se mordió el labio—. ¿Quieres
juguetón? —Intentó hacer caso omiso de la observación del hombre, él había
tratado con personas difíciles antes, y la mejor manera de complacerlos era cumpliendo
con sus deseos. Jaejoong pensó en una expresión cómica, pero ninguna llegó a su
mente.
—No tenemos toda la noche.
—...Pero no lo estás ayudando.
Jaejoong miró hacia la dirección de la voz. Suspiró bajamente
mientras Yunho se acercaba a ellos. ¿Debería ser Yunho el que lo viera en sus
peores momentos cada vez?
—¿Qué quieres decir con que no lo estoy ayudando?
—Le estás pidiendo que cambie las expresiones muchas veces.
—Te he pedido que cambies de expresiones muchas veces
también.
—Estás cansado, ¿por qué no me dejas tu trabajo a mí?
—Esta es la cámara de la compañía —gruñó el fotógrafo
cuando Yunho trató de tomar la cámara de sus manos. Y él se estaba riendo también.
Jaejoong se sintió mal por saber que él debía ser la fuente del mal humor del
hombre.
—Es por eso que puedo tomarla —Yunho tiró de la correa
quitándola de los hombros del hombre—. Vete y descansa, hyung.
—Solo porque hayas tomado clases de fotografía durante
tus vacaciones, no significa que puedas tomar buenas fotos —Él trató de arrebatar
la cámara de regreso a sus manos, pero Yunho era más alto y más fuerte.
—Veremos eso, si mañana no hay una buena fotografía
hecha por mí, voy a comprarte esta~ —Yunho levantó la cámara a su cara—. Los
veo mañana chicos, sólo conmigo es suficiente. Yo cerraré este lugar.
Jaejoong miró sorprendido como el resto del personal
hacia caso a la petición de Yunho. Él supo que Yunho debía ser una persona
importante en la empresa cuando ellos –la nuna maquilladora, el personal de
iluminación, y el director de vestuario– se despidieron después de que sin
habla se miraron el uno al otro por un minuto.
—Si todavía tengo que tomarle sus fotos mañana, tú
realmente vas a comprarme eso —dijo el malhumorado fotógrafo y se marchó.
—Él es difícil —Sonrió Yunho a Jaejoong mientras que
fijaba la correa de alrededor de su hombro—. Yo estaba preocupado al verlo torturándote
de esa manera, él debió tomar en consideración el que acabas de lastimarte la
cabeza.
Por lo tanto, ¿Yunho había estado allí desde el
principio? ¿No su sesión fotográfica había terminado hacía cinco horas? —Yo no
sabía lo que él quería...
—Yo nunca sé lo que él quiere —Yunho corto la frase de
Jaejoong.
—... pero iba a dar mi mejor esfuerzo. —Jaejoong
continuó, su corazón ya estaba latiendo rápido en torno a Yunho. Jaejoong tenía
miedo de que su corazón pudiera de verdad saltar fuera de su cuerpo cuando
Yunho pusiera la cámara delante de su cara y dirigiera el lente hacia él.
Sólo la idea de que Yunho pudiera verlo más cerca a
través del visor estaba poniéndolo nervioso.
—Él es impaciente, tal vez había trabajado por largas
horas —Yunho hizo click en el disparador—, pero aún así, no tiene derecho de
tratarte así —continuó viendo a la fotografía que tomó—. ¿Kim Jaejoongie, te
pedí que lucieras ‘nervioso’? Dios, me estás haciendo perder la paciencia.
Jaejoong se echó a reír, antes de que torciera los
labios con disgusto por la broma de Yunho. Yunho fotografió la expresión.
—Bien, vamos a empezar con lo de juguetón primero —Yunho
sonrió—, así que, dame lo mejor de ti.
Estar con Yunho era divertido, estar con Yunho destrozaba
sus nervios; estar con Yunho era poner todas las emociones juntas. Yunho hizo fácil
para él el dejarse ir a sí mismo. Él bromeó, se burló, lo elogió por obtener el
tipo de expresiones, emociones, gestos que él quería. Y Dios sabe que él había estado
presionando el botón adecuado en cada momento.
—Eso es perfecto —Yunho le mostró a Jaejoong la foto que
acababa de capturar, en la pantalla LCD de la cámara—. Tu expresión dio en el
clavo, y me gusta como tus labios están un poco torcidos —Señaló a los labios y
rió. Jaejoong notó de nuevo los dedos bien formados y el anillo.
Jaejoong se aclaró la garganta, pensando si debía o no
preguntar lo que había estado molestando a su mente. Yunho parecía que estaba
de buen humor, por lo que Jaejoong fue con su instinto. —El anillo que llevas,
es lindo...
Yunho alzó la mirada de la cámara, mirando al anillo
en el dedo. —Gracias —Sonrió.
—¿Tú lo compraste?
—Sí, ¿por qué?
—No, por nada —Jaejoong sacudió la cabeza. La
respuesta le hizo sentir extrañamente contento.
—Entonces, es tiempo de ser sexy ahora —dijo Yunho mientras
reposicionaba la correa sobre su hombro. Él debía estar cansado—. Ya que corrí
a nuna de aquí, no hay nada que podamos hacer sobre tu pelo... — Yunho se
acercó a él, Jaejoong contuvo la respiración cuando él puso su mano sobre su
cabello y lo desordenó—, esto funcionará.
Jaejoong sostuvo la mano de Yunho, deteniéndola de destruir
su peinado. —¿Qué diablos estás haciendo? —Murmuró Jaejoong, mirando hacia
abajo ya que el rostro de Yunho estaba demasiado cerca de él.
—Confía en mí, sé lo que estoy haciendo —Yunho llevó ambas
manos y las recorrió alrededor del cabello de Jaejoong, mezclándolo. Yunho
agarró la barbilla de Jaejoong y levanto su cara para echar un vistazo a su
obra maestra.
Los ojos de Yunho cerca de la iluminación eran del
color del amanecer. La forma de ellos era como los de una pantera, y sus labios
eran gruesos y rojos, y tenía un pequeño lunar en la orilla de ellos, como un
accesorio para su cara.
—Estas pálido.
Jaejoong liberó su barbilla de los dedos de Yunho.
—¿Tienes bálsamo para los labios?
—Tengo en mi bolso, pero este está en mi coche... —Jaejoong
se mojó los labios con su lengua, mordiéndolos también.
—Jaja, ¿estás tratando de comerte tus labios? —Yunho
se burló.
—¿Siguen estando pálidos? —preguntó Jaejoong. ¿Estaba él
demasiado nervioso?
—¿Necesitas ayuda? Además de la mirada profesional,
tenemos beso profesional.
Jaejoong torció su labio por la broma de Yunho – pero
no era una broma. Ni siquiera era un casto beso; estaba de lleno en sus labios
como si Yunho fuera capaz de entrar por la ligera apertura de la boca de
Jaejoong, chupando su labio superior mientras se apartaba del beso. Incluso hubo
un sonido por la separación.
—Hmm —Yunho se mordió el labio inferior—. Tienes tus
colores de regreso.
---
—Hyung, has estado espaciando mucho —Junsu golpeó la
rodilla de Jaejoong con el papel enrollado en su mano. Ellos estaban practicando
Love in the Ice, y el papel enrollado en realidad era la letra de la canción.
Junsu la había memorizado, Jaejoong también, después de tantas horas agotadoras
de práctica.
Jaejoong suspiró y puso su cabeza sobre el hombro de
Junsu.
—¿En qué estabas pensando?
Jaejoong sentía correr la sangre por su rostro, al
igual que lo hizo ayer por la noche. La sola idea le hacía delirar. Él ni
siquiera sabía cómo había pasado los últimos minutos con Yunho, terminando sus fotografías.
Tal vez fue porque Yunho actuó absolutamente normal, como si él no acabara de darle
un beso.
Jaejoong recordó el sabor de los labios de Yunho, la
sensación de la carne entre la suya.
—Junsu-yah, tu ramen, di gracias a Yoochun-sama —Yoochun
apareció trayendo dos tazones de ramen, pasó uno a Junsu –quien adorablemente murmuró
‘gracias Yoochun-sama’–. Jaejoong no estaba de humor para cocinar, lo que era
raro que cada vez que sus dongseangs iban a su casa, él siempre se aseguraba de
que ellos tuvieran algo que comer—. ¿Seguro que no quieres hyung? —preguntó
Yoochun cambiando el canal en el televisor.
Jaejoong solo sacudió su cabeza, bostezando sobre el
hombro de Junsu. Ni siquiera durmió lo suficiente, todo por un beso. Había
besado a una gran cantidad de mujeres antes, le había sido robado un beso antes
también, pero ¿por qué este perturbaba su mente día y noche?
—Ellos están en Japón en este momento —dijo Yoochun al
ver el show japonés en la televisión—, Yunho hyung y Changminnie.
Jaejoong sabían que estaban en Japón –a causa de dos
personas, Changmin quien llamó a Junsu justo antes de abordar el avión a Japón,
diciéndole que no serían capaces de reunirse y practicar durante una semana, y el
manager de Jaejoong quien lo llamó para informarle que no tenía que pasar por
otra sesión de fotos porque las imágenes de Yunho eran “muy buenas e hicieron felices
a todos”.
—Él tenía un vuelo temprano por la mañana... —Jaejoong
oyó a Junsu susurrarle a Yoochun—, y corrió al fotógrafo y terminó la sesión a
las tres am.
—Pensé que eso fue loco —Yoochun respondió—, pero fue
elogiado por las tomas. Ou y Changmin respondió, “¡ese presumido!” cuando le envié
un mensaje preguntándole si él pudo dormir lo suficiente o no.
—Voy a dormir un rato —Jaejoong quitó su cabeza del
hombro de Junsu y se recostó en el sofá, agarrando un cojín para cubrir su
rostro. Sólo él y Yunho no habían intercambiado números todavía, puso mala cara
por el hecho y cerró sus cansados ojos.
Jaejoong despertó cuando oyó la risa de Junsu. Su
dongseang estaba hablando por teléfono con alguien. Jaejoong miró la hora y se
frotó los ojos, se las arregló para conseguir una buena siesta de veinte
minutos.
—¡Yunho-hyung, eso es divertido! Debiste tomar una
foto de Changmin cayéndose, le dije que no usara plantillas demasiado gruesas.
Jaejoong volvió la cabeza hacia Junsu. ¿Yunho?
—Oh, él está despierto ahora, ¿quieres hablar con él? —Jaejoong
mordió sus labios cuando Junsu le pasó el teléfono y dijo—: Es Yunho hyung,
quiere hablar contigo.
Jaejoong se aclaró la garganta y saludó a Yunho. Yunho
le dijo hola de regreso y le preguntó si tuvo un buen sueño o no. Jaejoong admitió
que lo tuvo.
—Bien, y asegúrate de comer también. Junsu dijo que hoy
no has comido nada todavía.
—Lo haré, no te preocupes —Y entonces se hizo el
silencio. Jaejoong no sabía qué decir después de eso, y Yunho guardó silencio
también—. Creo que voy a pasarle el teléfono a Junsu —dijo, era suficiente para
él escuchar la voz de Yunho... y su respiración.
—No, está bien. Sólo dile que dije adiós. Cuídate —murmuró
Yunho—. Y le pedí tu número a Junsu, así que... —Hizo una pausa—, ¿puedo
llamarte esta noche?
Debido a que estaba tan feliz y estaba a punto de
reír, Jaejoong logró murmurar hmm, como su respuesta antes de colgar el
teléfono. Pasó el teléfono a Junsu y se dirigió a la cocina, queriendo cocinar
algo por su estómago gruñendo. Tal vez espagueti, pensó para sí mismo,
tarareando Love in the Ice todo el camino hasta la cocina.
---
Jaejoong se apresuró a la sala, pasando su teléfono a
Junsu. —Dile que no estoy aquí, que dejé mi teléfono y me fui a casa de mi
hermana —Jaejoong le dijo al confundido de Junsu.
—¿Qué? ¿Quién es? —Él miró en el identificador de
llamadas—. ¿Yunho hyung?
—Por favor. Yo no estoy aquí, dejé mi teléfono...
—¿Pero por qué?
—Solo hazlo.
Junsu frunció el ceño y contestó el teléfono. —Hola –
sí, es Junsu – estoy bien hyung, ¿Qué hay de ti? – bien – oh, él no está aquí –
dejó su teléfono, él está en casa de su hermana – ¿quieres dejarle un mensaje? –
está bien, adiós hyung, —Colgó Junsu y le pasó el teléfono a Jaejoong—, dijo que
él te devolvería la llamada. ¿Puedo saber que pasó ahora?
—Bueno, yo no...— Jaejoong ni siquiera sabía por qué
no quería contestar la llamada. Tal vez él no estaba dispuesto a escuchar la
voz del hombre, tal vez él todavía se sentía desanimado, tal vez sólo estaba
siendo un cobarde, él no lo sabía a ciencia cierta—, no sé de qué hablar con
él.
—¿Después de que pasaste horas hablando con él anoche,
y dos noches antes de esa?
Jaejoong asintió. —Se me acabó el tema, además, no hay
razón para que él me llame tan temprano en la mañana, cuando acabamos de hablar
ayer por la noche.
—¿A lo mejor tenía algo importante que decir...?
—Bueno, él pudo pasarte el mensaje a ti —Jaejoong
replicó, deseaba que Junsu dejara de hacerle preguntas.
—Puedes ser honesto conmigo hyung, Yoochun ya me dijo.
Él te gusta.
Jaejoong suspiró. Nunca tenían secretos entre ellos,
pero tenía la esperanza de que Yoochun no le dijera a Junsu de sus
sentimientos.
—Además, incluso si Yoochun no me lo dijera, me lo
imaginaria. Hablas de él 24/7. Así que, ¿qué pasó?
Jaejoong se sentó junto a Junsu, enfrentando al hombre
y consciente de su mirada, no tendría caso mentir. —Yunho tiene un amante —Jaejoong
sintió dolor con el recordatorio de que Yunho estaba tomado—. Yo sé que es
estúpido, pero estaba triste. Estoy triste por eso... estúpido lo sé —repitió Jaejoong—,
pero quizás, me enamore de él más de lo que debí enamorarme por cualquier
persona... y sé que es estúpido, ya que sólo han sido semanas de que lo
conozco, pero es él es... —Jaejoong suspiró—. Ya no quiero hablar de esto.
Junsu frunció las cejas, obviamente perdido sin saber
que decir.
—Está bien. Estoy bien —Sonrió Jaejoong—, sólo voy a evitarlo
hoy, y mañana actuare normal y quién sabe, tan rápido como me enamore de él, me
desenamoraré gtambién.
—¿Cómo sabes que él tiene un amante? —preguntó Junsu
cuidadosamente.
Jaejoong se mordió los labios. Ayer por la noche mientras
hablaba con Yunho, le había preguntado lo que estaba haciendo. Él respondió que
estaba mirando su anillo. —¿Oh, el mismo
anillo que siempre usas?
—Sip,
este anillo es especial, es como un anillo de bodas para mí. Lo compré para mi
amante y yo.
—Él me dijo eso —Jaejoong forzó una sonrisa, al igual
que se obligo a decir que estaba feliz de que Yunho tuviera un amante, y mintió
sobre que tenía que dormir y dijo adiós abruptamente, mirando al techo durante
horas después de la revelación, pensando ¿quién podría ser? ¿quién mantenía el
corazón de Yunho?
Él tenía el corazón roto, nunca se había imaginado que
tendría uno en un lapso de unas pocas semanas de conocer a alguien. Tal vez
Yunho era una excepción, él debía ser uno de esos tipos que rompían los
corazones inconscientemente. Tal vez lo de ellos nunca estuvo destinado a ser.
Jaejoong resopló por su propio pensamiento, claramente, había querido que pasara
algo entre Yunho y él. Dios, esto dolía.
—¿Le preguntaste quién era su amante?
Jaejoong negó con la cabeza. Junsu no preguntó nada
más y Jaejoong se alegró. Puso en vibrador su teléfono y lo puso sobre la mesa,
de pronto sintió ganas de ir a casa de su hermana. Invitó a Junsu y él estuvo
de acuerdo, y mientras agarraba la llave del coche y su chaqueta, Jaejoong se aseguró de dejar el celular
sobre la mesa tal como estaba.
Él pasó esa noche con su hermana, sobrinos y Jiji, su
mascota favorita. Se sentía mucho más tranquilo. Él había pensado en todo. Se
estaba haciendo más profundo el sentimiento porque Yunho lo impulsaba con su
amabilidad y calidez. Pero Jaejoong sabía que no había nada más que eso, era
sólo la forma en que Yunho era, y ellos estabas vinculándose, como se suponía
que ellos lo harían por la colaboración. Al igual que Junsu, Yoochun y
Changmin, y Changmin y él. Al igual que Yunho y él. Salió de la casa de su
hermana para la especial sesión de fotos de JYJ, y regresó a su casa a
medianoche.
Tenía once llamadas perdidas y tres mensajes:
“¿Dejaste
tu teléfono? Torpe Jaejoongie~”
“¿Todavía
estás fuera?”
“Llámame
cuando regreses... si puedes... pero voy a estar esperando =)”
Jaejoong arrojó su chaqueta en el sofá y se dirigió a
su dormitorio. Se acostó en la cama y marcó el número de Yunho, inhalo y exhalo
profundamente para calmarse.
—Hola torpe. ¿Acabas de regresar?
—Sí. Dejé mi celular y tengo once llamadas perdidas.
¿Qué es tan importante? —preguntó Jaejoong con calma.
Yunho se quedó callado por unos segundos. —No mucho,
sólo que la última noche de despedida fue tan abrupta... me preguntaba si todo
está bien.
—Ou —Jaejoong fingió una risa, recordándose a sí mismo
que Yunho era amable con él porque era una persona muy amable y no por otras
razones—. Estaba cansado ayer en la noche, y yo quería visitar a mi hermana
temprano en la mañana, antes de filmar también. Lo siento por hacerte preocupar.
Yunho lo comprendió y dijo adiós después de recordarle
a Jaejoong que durmiera temprano y no olvidara su teléfono de nuevo. Jaejoong le
envió un mensaje a Yunho después de la llamada telefónica, diciéndole que la
cuenta de Japón a Corea debía ser cara, así que esperaba que Yunho le enviara
un mensaje en lugar de llamar. Al día siguiente se despertó, él recibió un
mensaje de Yunho que ascendió a más de veinte para cuando llegó la medianoche.
Continúo; Jaejoong obtendría un mensaje de Yunho cada
hora hasta el día en que supuestamente él regresaría a Corea. Jaejoong revisó
su teléfono para ver si Yunho le envió un texto, mientras se encontraba en un
descanso de cinco minutos de la grabación de su video musical, pero cinco horas
pasaron sin que él consiguiera alguno.
Cuando Jaejoong llegó a su casa eran las diez pm, se
duchó y comió, él todavía no recibía ningún mensaje de Yunho. Hacía diez horas,
y Jaejoong se tragó su orgullo y le envió un mensaje.
“Acabo
de regresar de filmar, fue un día agotador. Supongo que estás demasiado
ocupado. Ganbatte kudasai con el trabajo, Yunho-kun \^ _ ^/ ... Por cierto, cuándo
vuelves?”
No recibió respuesta, pero media hora después sonó el
timbre de su puerta. Jaejoong, quien había estado sentado en su cama todo el
tiempo esperando un mensaje de Yunho, se dirigió a la puerta y se asomó por la
mirilla.
Era Yunho.
Jaejoong abrió la puerta, los ojos muy abiertos
mientras miraba a Yunho quien sonreía. Su pelo café estaba nuevamente negro, y
peinado hacia arriba y desordenado, pero aún se veía como un príncipe. Llevaba
una chaqueta de cuero y pantalones deslavados con botas de cuero hasta los
tobillos.
—Para ti —Jaejoong parpadeó cuando Yunho levantó una
bolsa de papel Louis Vuitton, nivelándola a su pecho—. Fue un día ajetreado, ya
que tenía que terminar todo antes de regresar, pero te conseguí una bufanda,
dijiste que la tuya se rompió cuando estabas grabando. Recibí tu mensaje, pero
yo ya venía hacia aquí desde el aeropuerto.
—Gracias —Jaejoong no sabía qué más decir, excepto que
expresar su gratitud—. Lindo estilo de cabello —añadió innecesariamente, pero eso
fue honesto y verdadero de corazón.
—Changmin dijo hola, él tenía que trabaja esta noche, filmando
un nuevo comercial —Yunho retrocedió unos pasos—. Tengo que irme, mi manager
está esperando abajo. Es bueno ver que estás bien, yo seguía preocupado de que hubiera
algo mal cuando no quisiste que te llamara más.
—No, la cuenta...
—Lo sé, lo siento —Yunho se rió entre dientes—. Así
que, buenas noches...
—Buenas noches y gracias de nuevo.
Yunho agitó su mano y se marchó. Jaejoong cerró la
puerta y respiró, parecía que desenamorarse de él no iba a suceder pronto. Su
corazón latía locamente, sus mejillas se calentaron, y él estaba extasiado por ver
al hombre. Abrió la bolsa de papel y sacó una bufanda blanca con negro, sonrió
para sus adentros. Había una etiqueta 'edición especial' unida a la bufanda.
Jaejoong se conmovió, más allá de eso, la sensación fue indescriptible. Él
recibió un mensaje justo en ese momento.
“En
serio, es bueno por fin verte. Pensé que me odiabas. PD: es broma ^ _ ~
Jaejoong sintió una mezcla de emociones por el
mensaje. Yunho vino todo el camino desde el aeropuerto debido a que debió haber
sentido que algo andaba mal. Por hacer que alguien tan amable se sintiera tan
preocupado, Jaejoong pensó que era despreciable.
Él necesitaba reavivar su amistad con Jung Yunho.
Aunque su corazón estuviera en riesgo de ser aún, más roto.
*W* Cuteee me gusta!! es tierno *W*
ResponderBorrarpobre JJ! TT
ResponderBorrarasnejfneirf pero que bonito!!! me encanta como Yunho lo trata! *-*
jae esta triste porque se entero que yunnie tiene un amante, ahora esta preocupado, si supiera.......
ResponderBorrarsnif!!!! fue a verlo directo del aeropuerto!!!
ResponderBorrarJaejoongie cree que tiene un amante...
La manera de preocuparse de Yunho por Jae, aparte de las llamadas, mensajes y el regalo a de querer decir algo... Sólo es cuestión de platicar y decir lo que sienten... Gracias
ResponderBorrarOh Joongie Yunho si es amable, demasiado, pero de verdad cree que gatos todo eso por alguien al que supuestamente acaba de conocer unas semanas......ahhhh Ojalá se de cuenta Yunho de lo quepasa.......
ResponderBorrarMuy hermoso gracias