Capítulo 1
Afortunadamente, durante su primera semana en el
trabajo, Yunho apenas y tuvo la oportunidad de ver a su ex novio —para su
alivio—. Junsu demostró no solamente ser un secretario responsable, sino también
un amigo increíble, aunque a veces se ponía a balbucear sin parar sobre cosas triviales,
molestando a todos a su alrededor.
Un viernes, el personal decidió darle al recién
llegado una fiesta de bienvenida en la sala de juntas de la empresa, dado que
él se llevaba muy bien con todos. En realidad, ellos sólo encontraron una razón
para reunirse para tomar alcohol, por lo que esta ocasión era simplemente
perfecta.
Así que allí estaba Yunho, escuchando el parloteo de
Junsu sobre sus clases de patinaje sobre hielo, luchando contra el impulso de
bostezar al ahogarse en champán.
—¡Tienes que intentarlo, Yunho-hyung! ¡Es súper
divertido! —Junsu rio mientras bebía de su vaso.
—Voy a pensarlo, Junsu. —Yunho asintió.
—Puedo llevarte a una clase de prueba, ¿qué te
parece?
—Voy a tener que revisar mis citas... —Yunho musitó—.
Veámoslo después.
—¡Oh, allí esta Jae-hyung! —Repentinamente, Junsu
apuntó hacia el lado opuesto de la habitación y empezó a agitar una mano frenéticamente—.
¡Jae-hyung! ¡Ven aquí!
—Maldita sea —Yunho maldijo en voz baja, tomando un largo
sorbo de su champán y dando una respiración profunda.
El pelinegro se acercó a ellos un poco receloso, y
tan pronto como se detuvo frente a los dos, Yunho y él intercambiaron miradas
incómodas. Entonces, Junsu rompió el hielo —del que probablemente ni siquiera se
dio cuenta que existía— para comenzar a balbucear de nuevo.
—Ustedes dos ya se conocían, ¿verdad? —preguntó
alegremente.
Aclarándose la garganta, Yunho se volteó para ver a
lo que fuera menos a Jaejoong, quien estaba dándole una mirada penetrante.
—Sí. De la universidad —Yunho dijo, tratando de parecer
indiferente.
—¡Que genial! ¿Así que ustedes eran compañeros de
clase?
—Por desgracia —Jaejoong se quejó, analizando a
Yunho, desde la cabeza hasta los pies.
—Así que dime, Jae-hyung, ¿cómo era Yunho-hyung en
las clases? ¿Era un buen estudiante?
Jaejoong lo pensó durante unos segundos antes de
responder.
—Él era el estudiante modelo. El aburrido Señor Correcto.
—Eso es... eso es bueno, ¿no? —Junsu sonrió, dándole
a Yunho codazo en el costado.
Jaejoong permanecía serio, casi enfadado, y su expresión
hacía que Yunho quisiera huir.
—¡Oh, ahí está el dongsaeng! ¡Changmin! —Junsu fue a
toda prisa tras el otro empleado, dejándolos solos.
Ambos se miran durante unos segundos, hasta que
Jaejoong tomó una copa de champán de un camarero que pasaba y observó a su
alrededor.
—Bienvenido —le dijo con un tono de suficiencia.
—Gracias. —Yunho entornó los ojos, también observando
a su alrededor, esperanzado en que Junsu regresara pronto.
—¿Cómo es tu vida ahora que tu futuro fue destruido?
—Jaejoong de repente fingió interés—. ¿No está tu padre enojado por saber que
trabajas aquí?
—No tenía muchas opciones. —Yunho suspiró.
—Oh —Jaejoong concordó irónicamente—, es bueno saber
que en este caso no te importó romper las expectativas de tu padre.
—Le dije que no tenía otra opción. —Yunho resopló—. No
quiero hablar de esto contigo.
Jaejoong no dijo nada más y volvió su atención a su champaña.
Entonces, Yunho notó el enorme anillo de diamantes que portaba, y después de percatarse
del interés que el más alto le daba, Jaejoong levantó la mano para colocarlo delante
de su cara.
—Bonito, ¿no es así? —Jaejoong sonrió.
—¿Te vas a casar? —Yunho se rio débilmente—. Pobre
chica.
—Yo nunca me casaría con una chica, no soy tú. —Jaejoong
contempló su propio anillo—. Me voy a casar con un abogado francés.
Levantando su ceja derecha por la sorpresa, Yunho se
rio otra vez.
—No sabía que te gustaran los extranjeros. ¿Qué edad
tiene? ¿Sesenta?
—Tiene cuarenta y dos, y su buena apariencia supera
la de todos mis ex-novios. —Jaejoong soltó un suspiro de enamoramiento, mirando
hacia el techo—. Es justo lo que necesitaba, un hombre maduro.
—Felicitaciones —Yunho dijo secamente—. ¿Cómo van a casarse?
—Probablemente iremos a Estados Unidos para hacerlo,
no estamos seguros todavía —declaró con felicidad—. ¿Bueno y qué hay de ti? Han
pasado cuatro años, ¿cierto?... ¿Hay algo nuevo en tu vida?
—He estado demasiado ocupado trabajando.
—Oh, eso es muy triste. —Jaejoong simuló sentir dolor—.
Eso era de esperar en ti.
Rodando los ojos, Yunho sólo se centró de nuevo en
su copa.
—Como sea, te dejaré solo —Jaejoong declaró, girando
sobre sus talones—. ¡Nos vemos!
Viendo como Jaejoong se iba a platicar con un grupo
de gente, le trajo a Yunho un malestar en su pecho. ¿Estaba sintiéndose mal
porque Jaejoong se iba a casar? No, eso no tenía ningún sentido, lo que pasó
entre ellos había sido hace mucho tiempo. Probablemente sólo era por la sorpresa
y nada más.
✲ ✲ ✲
Durante las semanas siguientes, Jaejoong y Yunho
entraron en una especie de extraña relación. Cada vez que se veían, Jaejoong
siempre se burlaba de él, incluso llegando al punto de revelar ante todos, algunos
de sus comportamientos vergonzosos. Yunho, por su parte, trataba de terminar el
tema con rapidez, aunque a veces se rendía y se defendía contratacando con burlas
hacia el pelinegro. Los otros empleados creían que ellos eran viejos mejores
amigos que casualmente se habían reencontrado y sólo estaban recuperando el
tiempo perdido, cuando en realidad una guerra se suscitaba entre ambos.
Un día, después del trabajo, todo el mundo decidió ir
a relajarse a un karaoke, ahora con la excusa de que la semana estuvo demasiado
ocupada y agotadora.
—Yunho duerme con la boca completamente abierta —Jaejoong
reveló, riendo a carcajadas. Ya mostraba signos de estar ebrio e ignoraba por
completo la mirada de muerte que Yunho le envió desde el lado opuesto de la
mesa—. ¡Muéstrales tu rostro dormido, Yunnie!
—Eso no es cierto. —Yunho rodó los ojos, bebiendo de
su cerveza.
—¡Ah, vamos, muéstranosla Yunho! —Tiffany sujetó su brazo
juguetonamente, rogándole—. Apuesto a que es linda.
—Eso me recuerda al día en que atrapé a Junsu
durmiendo cuando fui a reunirme con Yunho. —Changmin se rio—. Le pregunté si él
estaba en su oficina, y Junsu dijo que estaba hablando con jirafas...
—¡Oye, yo no dije eso! —chilló Junsu.
—¡Tú lo dijiste! Me pregunto qué clase de locuras pasan
por tu mente...
Dado que bebían sin parar, pronto todos estuvieron fuera
de sí. Entonces, Tiffany y Yuri decidieron ser las primeras en cantar en el
karaoke.
Mientras que Yuri estaba sólo divirtiéndose sin
importarle en absoluto el oírse bien, Tiffany estaba totalmente concentrada en tratar
de sonar emotiva y hermosa. A mitad de la canción, ella comenzó a cantarle directamente
a Yunho, poniéndolo completamente incómodo. La letra hablaba acerca de parejas
y amor y cosas como esas, por lo que su coqueteo hacia él era más que obvio.
Jaejoong sólo observaba en silencio la interacción de ella y su ex, no haciéndole
gracia. Él ya sabía que su secretaria sentía algo por Yunho, considerando que
había estado hablando de continuamente de él en la empresa.
Cuando terminaron sus canciones, Yuri le pasó el
micrófono a un Junsu saltarín, mientras que Tiffany intentaba convencer a Yunho
de que cantara.
—¡Vamos oppa, canta por lo menos una! —le insistía
de manera linda, por lo que Jaejoong rodó los ojos.
—No, no, Tiffany-ssi, ahora no. —Él se negó de nuevo,
con cortesía.
Moviéndose de su lugar, Jaejoong se acercó a su
secretaria.
—Permíteme a mí, Tiffany.
—¡Oh, Jaejoong oppa tiene una voz impresionante! —ella
aclamó, entregándole el micrófono y sentándose al lado de Yunho—. ¡Vamos, vamos!
Jaejoong realmente podía cantar bien, pero Junsu
estaba demasiado borracho para acompañarlo, así que ambos terminaron cantando
fuera de tono y haciendo voces divertidas. Durante la canción, Yunho estuvo tratando
de evitar a Tiffany, quien estaba acercándosele más y más con cada minuto,
mientras él trataba de prestar atención a Jaejoong. El pelinegro también estuvo
disparándole miradas a cada rato, disgustado por la proximidad con su
secretaria.
Cuando la canción terminó, Junsu hizo que Changmin fuera
a cantar una con él. Jaejoong caminó de vuelta a su anterior sitio en la mesa,
con los ojos persistentes en Yunho, quien de repente se sintió incómodo con la
atención. Entonces, el moreno se puso de pie y se disculpó para ir al baño, no
mucho después, Tiffany también se retiró con la misma excusa. Jaejoong sabía
que probablemente ella iba a hacer algo, ya que por lo general era muy
contundente con sus intereses amorosos. Echó una mirada alrededor, y después de
asegurarse de que todos estuvieran demasiado entretenidos con Changmin y Junsu,
también se fue.
Una vez fuera, Jaejoong se dirigió a los baños.
Antes de dar vuelta en el pasillo, escuchó una conversación y se detuvo para
poder oír sin ser notado.
—Lo siento, Tiffany-ssi. —La voz de Yunho le respondió
a la chica.
—¿Pero por qué? —ella preguntó, incrédula. —¿No soy
bonita?
—No, no, Tiffany, eres hermosa. —Él trató de
calmarla—. El problema no eres tú, soy yo.
«Creo que es la primera vez que esta excusa es
verdadera». Jaejoong pensó,
conteniendo una risita.
—Esto no tiene sentido. —Ella suspiró, sacudiendo la
cabeza—. Ningún sentido.
—Lo siento, yo…
Antes de que Yunho terminara su frase, Jaejoong emergió
y pretendió sorprenderse al verlos platicando.
—Omo, ¿interrumpo algo? —Jaejoong habló exageradamente,
por lo que Yunho entornó los ojos.
—Voy a regresar allá dentro. —Tiffany se dio la
vuelta y se marchó, pasando a Jaejoong con un puchero.
Después de oír que la puerta de la sala de karaoke fue
abierta y cerrada, Jaejoong vio hacia Yunho, sonriendo.
—¿Por qué no le dijiste que tu “problema” es ser
gay?
—¿No sabes que es de mala educación escuchar las
conversaciones de otras personas? —Yunho lo miró fijamente, con una expresión
seria.
—Ups, lo siento —Jaejoong se mofó—. ¿Hasta cuándo
vas a esconderlo, oppa?
Inhalando profundamente, Yunho vio hacia el techo.
—¿Tu novio se encuentra todavía en Francia? —Yunho decidió
contraatacar con su propia provocación—. ¿Has estado privado de sexo por
cuantos meses ya? ¿Tres?
—Cállate. —Jaejoong frunció el ceño, cruzando los
brazos—. Él vino la semana pasada a verme.
—Entonces, ¿por qué sigues molestando por doquier? Ah,
¿no fue suficiente para tu incansable trasero?
—Voy a golpearte.
—Oh, lo siento. —Yunho levantó sus manos en defensa—.
Me resulta muy extraño que apenas y veas a tu prometido.
—Él está ocupado. Trabajo, ya sabes —Jaejoong lo dijo
con simpleza—. Es un abogado muy famoso.
—Espero que esa sea su verdadera razón.
Impresionado por la declaración, Jaejoong miró al
más alto con incredulidad.
—Estás ofendiéndome.
—¿En serio? —Yunho bromeó—. ¿No es eso lo que tú me haces
todo el tiempo?
—Tengo mis razones. —explicó Jaejoong y se alegró
cuando la mirada de Yunho cayó al suelo, molestó por el comentario—. Como sea,
voy a regresar.
—Oye, ya me voy. Diles a los demás que no me siento
muy bien —Yunho habló, antes de caminar hacia la entrada.
—¿Tienes miedo de enfrentarte a Tiffany? —Jaejoong
dijo, sonriendo, y continuando en un tono melódico—. Les diré que tienes un severo
caso de diarrea.
—Adiós. —Yunho agitó su mano, ni siquiera dándose vuelta
para enfrentarse a su ex.
✲ ✲ ✲
Las interminables bromas continuaron. Incluso
durante las juntas, cuando la mirada de Yunho caía accidentalmente sobre
Jaejoong, él se la devolvería con un aire de petulancia, por lo que Yunho rodaría
los ojos. Por suerte no tuvieron que tuvieron que tratar directamente entre sí por
cuestiones de trabajo, de lo contrario su vida seguramente sería un infierno para
ahora.
Una noche, mientras Yunho se preparaba para salir del
trabajo, se encontró con Jaejoong en el estacionamiento. El pelinegro estaba
sin su chaqueta y de cuclillas junto el neumático de su coche, al parecer
tratando de sacarlo. Por curiosidad, caminó hacia él, sonriendo.
—¿Algún problema? —preguntó.
—Déjame en paz —Jaejoong se quejó con cansancio,
dejando que la llave que tenía en la mano cayera al suelo. Sus manos y la camisa
antes blanca, estaban sucias, y mientras trataba de quitarse el fleco que
bloqueaba su vista, terminó ensuciándose también las mejillas.
—¿No sabes cómo cambiar una llanta?
Con la apenas paciencia que le quedaba, Jaejoong
sólo miró a Yunho, quien seguía sonriéndole.
—No, no sé —admitió, poniéndose de pie.
—Eso es una vergüenza. —Yunho suspiró ruidosamente—.
¿Por qué no llamas a tu novio para que te ayude?
—Ya se fue —Jaejoong declaró en un tono triste.
—¿En serio? ¿Pero no fue hace como dos días, cuando andabas
todo risueño porque él iba a venir a verte?
—Tenía una reunión importante, así que no podía
permanecer más tiempo —reveló con tono sombrío—. ¿Por qué estamos hablando de
esto?
—¿Debido a que se te ponchó la llanta y no sabes qué
hacer para cambiarla?
—Ah, gracias —Jaejoong gruñó, mirando su auto—. Supongo
que tendré que llamar a una grúa.
—¿Por una llanta ponchada? Por favor... —Yunho se
rio.
—¿Qué? ¿Vas a cambiarla por mí?
—¿Qué voy a recibir a cambio si lo hago? —Yunho se
cruzó de brazos, curioso.
—Mi agradecimiento eterno —exclamó Jaejoong.
—Eso es muy poco.
—Voy a pagar tu almuerzo durante una semana.
—Oh, me tengo que ir. —Yunho vio su reloj de pulso—.
Mi drama favorito comenzará pronto.
—¡Yah! Vuelve aquí —gritó, antes de que Yunho se
fuera—. ¿Qué es lo que quieres?
—Quiero que dejes de molestarme, para siempre. Tengamos
una relación profesional de ahora en adelante.
Jaejoong lo miró con escepticismo, parpadeando dos
veces.
—Estás siendo ridículo al pedirme eso.
—Eso fue hace cuatro años. ¿No puedes olvidar el
asunto?
—Ah, claro. Voy a olvidarme de mi larga lucha por
superar tu repentino abandono —Jaejoong estipuló, arrodillándose en el suelo
para de nuevo empezar a tratar de quitar el neumático—. Puedes irte.
Arrepentido, Yunho suspiró.
—Tuve mis razones —susurró.
—Sí, grandiosas razones. Ser la marioneta de tu
padre es realmente una manera impresionante de vivir la vida —Jaejoong se burló,
enojado—. Cuando me enteré del porqué me dejaste, yo... Dios, quise matarte.
—No lo entiendes.
—No, no lo hago. No solemos rendirnos a algo
destinado a ser, ya sabes —Jaejoong soltó, luego se lamentó—. ¿Qué estoy
diciendo? Sólo vete, hoy estoy estresado.
Sin decir nada, Yunho se quitó su chaqueta y se
hincó a un lado de Jaejoong, quitándole la llave mientras se arremangaba.
—Deja que te enseñe —le dijo, ya empezando a aflojar
los tornillos.
Ambos permanecieron en silencio mientras Yunho hacía
el trabajo, con Jaejoong observándolo de cerca. Con facilidad, Yunho terminó bastante
rápido, para sorpresa del otro.
—Listo. —Yunho se levantó y le regresó la llave.
—Gracias. —Jaejoong inclinó su cabeza, conteniendo un
sonrojo.
—De nada. —Yunho recogió la chaqueta y el maletín, del
capo del coche—. Ahora me iré, tal vez todavía pueda ver la mitad del drama...
—Yunho —Jaejoong lo llamó en un tono suave, por lo
que se giró lentamente hacia él.
—¿Sí?
—Sólo quería decirte que si no me hubieras dejado,
probablemente con el que estaría casándome serías tú. Sé que nunca te comprometiste
conmigo, pero de todos modos... —Jaejoong dijo, abriendo la puerta de su carro—.
Nos vemos mañana.
Después de algunos segundos de agitación interna
causada por las palabras de Jaejoong, Yunho se dio la vuelta y caminó hacia su
auto, sintiendo un dolor agudo en el pecho. Sabía que Jaejoong era el amor de
su vida, pero aun así lo dejó para seguir los deseos de su padre, lo único que
podía pensar en ese entonces era en hacerlo sentir orgulloso. Él había tomado
su decisión.
estos ex novios parecen erro y gato pero como dice el dicho :del odio al amor hay un paso y donde fuego hubo cenizas quedan, presiento q pronto se encendera la llama de la pasion y esto estara q arde kyaaaa, ando muy romantica sera porque tvxq viene a peru?!!! siiii q felicidad *w*
ResponderBorrarohhh así q lo abandono, con razón Jaejoong lo trata así u.u
ResponderBorrarpero YunHo sigue enamorado de el, xq no hace algo x recuperarlo????
donde hubo fuego cenizas quedan; es obvio que jae esta aun muy dolido por su abandono, corro a leer el siguiente cap.
ResponderBorrarpobre jj abandonado por el amor de su vida nomas por seguir los sueños del padre tonto yunho que lo dejo ir si de verdad lo quería
ResponderBorrarUmm en verdad que estos estan teniendo un momento dificil..
ResponderBorrarYa sabia que habia gato encerrado T^T..Yunho abandonó a Jae...que mal Yunho -.- .. Esto esta interesante!!! ^o^
ResponderBorrarAsí que fue porque lo abandono y lo dejar ir, por lo que Jae esta tan enojado con Yunho y por eso lo ataca. A ver que solución tienen para eso y la primera es hablar sobre lo sucedido. Gracias
ResponderBorraraaaw JaeJoong parece un niño jugandole bromas y contando cosas de Yunho XD, con razón fue porque lo dejo para darle en el gusto al papá <. <
ResponderBorrarOdio eso! Querer que tus padres se sientan orgullosos a Costa de tu felicidad es una tontería, por no soltar otra palabra, nunca entendere eso, si yo encontrara mi felicidad en alguien pelearia contra lo que sea por esa persona.. ..Ojalá Yunho pensara igual.. ..es obvio que ambos aun no lo superan.. ..y el tal prometido de Jae tiene a alguien mas.. ...no se necesita ser muy perspicaz para darse cuenta. ....
ResponderBorrarEspero y Yunnie haga algo para que Jae le de una segunda oportunidad.. .
Está buenísimo, sabés odio pensar que Yunho perdío el amor de su vida por la intervención de su padre, se valiente no lo vuelvas a perder Yunho. Gracias
ResponderBorrarEstá buenísimo, sabés odio pensar que Yunho perdío el amor de su vida por la intervención de su padre, se valiente no lo vuelvas a perder Yunho. Gracias
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